jueves, 13 de agosto de 2009

Taj Majal



Mis queridos amigos:
Como decíamos ayer... (Fray Luis de León me perdone)
El pasado fin de semana seguí recorriendo este país que, en un 98%, niega el bautismo a sus hijos. Y esta vez me dejé caer por Nueva Delhi y Agra.
La capital de la India es una ciudad que parece que no lo fuera. Es mas bien una sucesión de pueblos, de casas bajas, entramados de urbanizaciones y, como casi siempre en India, de una masa humana difícil de cuantificar, no sólo en número, sino en hábitos, costumbres, religión y cuantas cosas podáis imaginar.
Pero la finalidad real del viaje era acabar en Agra, lugar donde se encuentra el celebérrimo Taj Majal. Y la entrada de hoy tiene casi como única misión dejar plasmada una foto en dicho lugar.
No creo que haga falta explicar la historia del edificio, de sobra conocida o al alcance de cualquiera por internet.
Esta lágrima en la mejilla del tiempo que diría Tagore fue levantada por 20.000 obreros que supongo yo que se acordarían de la princesa tanto como su marido (o mejor dicho, de la madre de ésta) durante los 20 años que tardaron en levantar este
mausoleo de marmol blanco.
Pero los turistas que disfrutamos del trabajo de otros simplemente nos quedamos admirados del poder creador que tiene el amor (nada, por otra parte, que no sepamos los católicos). Pero incluso una persona como un servidor, lento y perezoso en dicho arte, puede pensar ante esta obra que la vida merece más la pena ser vivida cuando amas a alguien más que a ti mismo. Os lo contaré cuando eso acontezca o dejaré que me lo contéis los que ya lo hayáis sentido.
Simplemente hay sitios donde lo más prudente es guardar respetuoso silencio y que cada uno piense lo que crea. Más en este país, la mayor democracia del mundo (aunque no la mejor).

"Por eso abondanará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne. Pues lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre"

4 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Actualizas de tanto en tanto que ya ni me acuerdo de entrar habitualmente, aunque esta vez hubo suerte, la entrada tiene pocos días.

    Bueno, visita obligada, ¿no? La verdad es que parece que hay poca gente, me imaginaba que allí siempre habría millones de personas.

    A ver cuando comentas algo sobre el curro, que al fin y al cabo es a lo que fuiste, y ya llevas unos meses.

    Venga, a seguir bien.

    PD/ Borré al anterior que tenía una falta ENOOOOORME.

    ResponderEliminar
  3. Ando sin internet en el piso, por eso suelo llegar tarde a las actualizaciones.

    Te veo de lo más mimetizado con el paisaje...

    ResponderEliminar
  4. Me ha encantado y me hubiese encantado poder ir a verlo personalmente...gran oda al amor..sin lugar a duda una de las maravillas de nuestro mundo....afortunado tú Davi...aunque no estés en esa etapa de enamoramiento profundo tan sólo viéndola puedes apreciar todo lo que sintió ese hombre al crear tal monumento a su princesa...cuídate mucho.Bsines

    ResponderEliminar